El injerto de hueso es un técnica de regeneración ósea que nos permite mejorar la cantidad y calidad del hueso alveolar, con el fin de llevar a cabo tratamientos de implantología dental exitosos. Un procedimiento incluido en las técnicas de cirugía oral que sirve para colocar implantes dentales en pacientes que tienen falta de soporte óseo en la encía.
¿Qué es un injerto de hueso dental?
El injerto de hueso dental es una solución de calidad para quienes han perdido uno o más dientes, con las graves consecuencias de reabsorción ósea. El equipo de cirugía oral y maxilofacial de la Clínica Dental Vinateros planifica este tipo de intervenciones de manera personalizada, apostando por abordajes a medida. El Dr. Pedro Ruiz recurre a su amplia experiencia como cirujano maxilofacial, con el fin de aportar alternativas de calidad para cada paciente de nuestra clínica dental en Madrid.
A la hora de ubicar los implantes dentales, es importante tener en cuenta la situación oral del paciente, sus condiciones de mantenimiento y la necesidad de tener una base ósea que haga las veces de soporte para los nuevos dientes.
Existen dos tipos de defectos óseos. Unos son profundos y estrechos, con una gran oportunidad de cicatrización, mientras que otros son planos y presentan más dificultades para el injerto de hueso dental.
La colocación de los implantes dentales será aquella que gracias a un soporte óseo artificial permita construir una prótesis dental que cumpla los requerimientos funcionales, fonéticos y estéticos que requiere el paciente.
Por lo tanto, el injerto de hueso dental es un protocolo que llevamos a cabo cuando la estructura ósea del paciente no es suficiente para mantener tanto las funciones estéticas como de soporte dental. El propósito de la técnica es aumentar la base ósea, que posteriormente aguantará las prótesis dentales.
¿Para qué sirve el injerto óseo?
El injerto de hueso dental garantiza un soporte estable para los futuros implantes dentales osteointegrados, que más tarde acogerán las prótesis. El implante dental requiere de buena cantidad y calidad ósea, con el fin de que se produzca una correcta osteointegración entre el tornillo de titanio y el hueso. Por lo tanto, una buena densidad ósea es una prioridad.
Tipos de injerto de hueso dental
- Hueso humano o animal: se trata de la obtención de un injerto autólogo, del propio paciente, o de una especie animal, como la bovina.
- Regeneración ósea: mediante la regeneración tisular guiada también podemos ofrecer resultados de alta calidad. Recurrimos a esta técnica cuando no es posible obtener un hueso natural. En este caso, utilizamos material colágeno o de titanio, que nos permite recomponer el hueco del injerto, evitando así que la encí8a desplace la estructura.
Requisitos necesarios para un injerto de hueso dental
Al hablar de regeneración del hueso y de las técnicas de aumento óseo debemos valorar la cantidad de hueso que tiene el paciente, cuánto es útil y cuánto le hace falta. En nuestra clínica dental, el Dr. Pedro Ruiz lleva a cabo pruebas vanguardistas, que nos aportan numerosa información sobre la calidad de las estructuras dentales de cada paciente. Este tipo de tecnología odontológica es una prioridad para realizar cirugías exitosas.
Hay casos en los que conseguimos restaurar el 100% del hueso, pero la cicatrización es impredecible y pueden surgir inconvenientes. Además, por ejemplo, el consumo de tabaco, alcohol o ciertos alimentos, son factores que afectan negativamente a la regeneración del hueso dental. Seguir las recomendaciones del cirujano oral es clave para que el resultado del injerto de hueso dental sea estupendo.
También se debe conseguir una buena estabilidad en la zona de la herida, con una fijación mecánica de la membrana adecuada, bien sea con clavos, chinchetas o tornillos, especialmente en los defectos óseos planos. Y muy importante, la estructura debe mantener sanos los tejidos periimplantarios, para evitar una periimplantitis.
La periimplantitis es una patología periodontal, similar a la periodontitis o piorrea, que se produce en pacientes que llevan implantes dentales. Mejorar las técnicas de higiene bucodental es muy importante si quieres evitar que las bacterias orales provoquen graves infecciones en la boca.
¿Qué materiales se utilizan para realizar injerto de hueso dental?
En intervenciones como la cirugía preprotésica, un injerto de hueso puede extraerse del propio individuo (autoinjertos), de un individuo de la misma especie (aloinjertos), de diferentes especies (xenoinjerto) o de cerámicas cristalinas (aloplásticos).
En cualquier caso, el paciente que se somete a una cirugía de regeneración ósea necesitará antibióticos para minimizar el dolor y la asepsia, que puede extenderse hasta unos 6 u 8 meses.
Posibles Complicaciones
Este procedimiento conlleva de una cirugía compleja, en la cual existen diferentes factores determinantes que pueden hacer fallar el tratamiento.
Antes de toda la cirugía, el Dr. Ruiz, nuestro cirujano maxilofacial, te explicará en qué consiste el proceso y cuáles son las indicaciones, además de las posibles complicaciones del procedimiento. Algunas de ellas son:
- Lesión de los nervios o músculos cercanos al hueso afectado.
- Daño en raíces de los dientes adyacentes.
- Pequeñas fisuras en el hueso generado al colocar el implante.
No obstante, hoy en día, gracias a las técnicas quirúrgicas actuales y a los avances en odontología, podemos diseñar intervenciones quirúrgicas altamente predecibles, que nos permiten generar una mayor seguridad durante el abordaje, a la vez que minimizamos los posibles riesgos y complicaciones.
Postoperatorio del injerto de hueso
Durante la cirugía, aplicamos anestesia local o sedación consciente, aunque también se puede proceder a la anestesia general si el paciente lo necesita. De este modo nos aseguramos de que las molestias sean inexistentes.
Para calmar los dolores propios del postoperatorio, el dentista recetará antibióticos o analgésicos para prevenir infecciones. Es importante que el paciente siga las indicaciones de nuestro cirujano para controlar el dolor y acelerar la cicatrización.
Es importante que el paciente sea responsable también al comer: evitar los alimentos duros o gomosos, muy fríos o muy calientes, hasta que la zona esté desinflamada, así como evitar escupir, ejercer presión o cepillar el área herida.
Los implantes dentales o prótesis dentales no se podrán colocar hasta que la zona se encuentre totalmente recuperada, entre 6 meses y un año. Mediante revisiones periódicas y exámenes de rayos X comprobaremos que la recuperación se produce correctamente y podemos proceder a la restauración estética.
Consulta tu caso
Es importante cuando se van a producir estas intervenciones contar con más de una opinión. La formación y la experiencia de los especialistas es fundamental para un buen diagnóstico y un mejor plan de tratamiento. Pide cita en Vinateros y nuestro equipo médico multidisciplinar resolverá todas tus dudas. La primera visita es gratis en nuestra clínica dental.