La mordida: Todo lo que debes saber
Los problemas de mordida son tan frecuentes debido a que todos los seres humanos tenemos diferentes tipos de mordida, por lo que no es coincidencia que sea la tercera afección bucodental a nivel mundial, siendo una necesidad urgente para el paciente atender este padecimiento a tiempo.
Si pensamos que una mala mordida solo afecta la estética del rostro, nos quedamos cortos con el sin fin de problemas que la posición incorrecta de la mandíbula trae consigo y más aún por el hecho que los síntomas suelen ser degenerativos y empeoran con el tiempo.
Es por ello que en nuestra Clínica Vinateros hemos preparado el siguiente post con la información necesaria para quienes padecen de este problema de maloclusión, con el fin de que lo corrijan lo más pronto posible y puedan recuperar la funcionalidad de su dentadura y su salud bucal.
¡Quédate con nosotros hasta el final!
¿Qué es la mordida?
La mordida u oclusión dental es la forma en que los dientes hacen contacto entre sí, es decir, la forma en que las piezas dentales se juntan al cerrar la mandíbula.
La mala mordida consiste en cualquier tipo de alteración del crecimiento óseo del maxilar o posición de los dientes, que impide una mordida normal o perfecta.
Por el contrario, una mordida perfecta será aquella en la que los dientes y encías superiores encajan con dientes y encías inferiores a la perfección. Puedes comprobarlo porque las puntas de los molares se ajustan en los surcos de los molares opuestos.
Cuando una mordida es perfecta, la articulación de la mandíbula está centrada, y todos los músculos, ligamentos y tejidos intervienen equilibradamente en el proceso de masticación.
¿Cuáles son los diferentes tipos de mordida dental?
Los tipos de mordida más habituales son:
- Sobremordida: esta maloclusión se desarrolla cuando los incisivos superiores ocultan mucho a los inferiores.
- Submordida: tiene el efecto contrario, es decir, los incisivos inferiores ocultan mucho a los superiores.
- Mordida abierta: cuando hay una separación excesiva entre piezas dentales inferiores y superiores.
- Mordida cruzada o en tijera: es uno de los tipos de mordida más habitual y ocurre cuando la mandíbula muerde por fuera del maxilar superior.
- Desviación de la línea media: cuando la línea entre dientes inferiores y superiores no coincide en su parte central debido, entre otras causas, a la falta de alguna pieza dental.
- Apiñamiento: una descolocación severa de los dientes que repercute en la mordida.
- Protrusión dental: este tipo de mordida se da cuando los incisivos de la arcada superior, inferior o de ambas están ligeramente inclinados hacia delante y se relaciona con hábitos infantiles como el usar chupete o chuparse el dedo.
- Retrusión dental: es el caso contrario al anterior, es decir, que los dientes incisivos están inclinados hacia el interior de la cavidad bucal. Este es uno de los tipos de mordida más raros, y suele provocar traumatismos.
¿Cuáles son las causas que generan una maloclusión?
Los problemas relacionados con los diferentes tipos de mordida son multifactoriales, pero la mayoría de las veces es a consecuencia de:
- Factores genéticos: tamaño y forma de los dientes, relación basal de los maxilares, función labial y lingual (condición hereditaria).
- Factores locales: pérdida prematura de dientes temporales y permanentes, retención prolongada de los dientes temporales, dientes ausentes, frenillo labial anormal, traumatismos dentales y restauraciones incorrectas.
- Factores ambientales: hábitos bucales lesivos durante la infancia (uso excesivo del biberón, chupete o dedos), imitación, actitudes mentales.
- Factores sistémicos: metabolismo defectuoso, enfermedades y trastornos constitucionales, funcionamiento anormal de las glándulas de secreción interna.
En todos los casos, lo aconsejable es hacer un diagnóstico temprano para atacar el problema desde su fase inicial.
¿Cuáles son las consecuencias de una mala mordida?
Algunas de las afecciones que genera la mala mordida o maloclusión son el desgaste del tejido dental, pérdida del esmalte, debilitación de las encías por la constante tensión y sobrecarga en los músculos de masticación; todo esto puede generar a largo plazo en el paciente sensibilidad dental.
También, la maloclusión suele producir afecciones bucodentales como caries, gingivitis, sarro o halitosis debido a las zonas vacías que se crean, en las cuales se dificulta la limpieza y se alojan los restos de comida.
Finalmente, la mala posición maxilar también puede derivar en problemas digestivos, ya que la falta de alineación de los maxilares afecta la correcta masticación de los alimentos.
¿Se puede corregir una mala mordida?
La respuesta es… ¡Sí! Los resultados son más efectivos siempre que se corrijan a tiempo y se eviten los daños colaterales que implican una maloclusión dental.
Es indispensable corregirla desde la infancia, aunque si eres una persona adulta también puedes corregirla.
¿Cuáles son los tratamientos existentes para cualquier tipo de mala mordida?
- Ortodoncia
Por lo general puedes corregir una maloclusión gracias a la ortodoncia, es el tratamiento más indicado en casi todos los casos.
La ortodoncia convencional (brackets metálicos) sigue siendo la elección más demandada para tratar los tipos de mala mordida, aunque existen otras opciones más estéticas como los brackets de porcelana, ortodoncia invisible y ortodoncia lingual, que pueden ayudarte en este proceso.
- Cirugía ortognática
La cirugía maxilar, también conocida como “cirugía ortognática”, corrige irregularidades en los huesos maxilares al igual que alinea la mandíbula y los dientes para mejorar su funcionamiento.
Hay personas que no quieren someterse a este tipo de intervención porque les resulta demasiado invasiva y prefieren acudir únicamente a la ortodoncia, aunque tarden más tiempo en su corrección.
Sin embargo, recuerda que la cirugía ortognática es una opción correctiva ante problemas de mandíbula severos que no pueden solucionarse solamente con ortodoncia.
En la mayoría de los casos, también deben de usar ortodoncia en los dientes antes de la cirugía y durante la recuperación hasta que se complete la curación y la alineación deseada.
¿Cuáles son los beneficios de optar por la cirugía?
Algunos de los beneficios que podemos obtener a través de la cirugía son:
- Facilitar la mordedura y la masticación en general.
- Corregir problemas para ingerir alimentos o hablar.
- Minimizar el desgaste excesivo y la rotura de los dientes.
- Corregir los problemas de mordida o de cierre de la mandíbula (mordida abierta).
- Corregir desequilibrios faciales (asimetrías) como el mentón pequeño, el prognatismo, la sobremordida y la mordida cruzada.
- Mejorar la capacidad de los labios para cerrarse de forma completa y cómoda.
- Aliviar el dolor causado por un trastorno de articulación mandibular.
- Reparar lesiones faciales o defectos congénitos.
- Brindar un alivio para la apnea obstructiva del sueño.
¿Cuál es la mejor edad para tratar la mala mordida?
Se recomienda tratar las maloclusiones durante la infancia, cuando el desarrollo del maxilar aún no ha concluido, por lo que se aconseja llevar a los niños al dentista y al ortodoncista por primera vez cuando tienen aproximadamente 6 años.
Sin embargo, la cirugía maxilar es adecuada una vez finalizado el crecimiento, por lo general, para las mujeres entre los 14 y 16 años y para los hombres entre los 17 y 21 años.
No obstante, en caso de que detectemos alguna anomalía en el crecimiento o veamos que los hábitos contraproducentes que hemos mencionado son recurrentes, se recomienda acudir antes.
¿Qué profesionales intervienen en casos de mala mordida?
En la mayoría de los casos de maloclusión, lo recomendable es que ese trabajo interdisciplinar sea realizado en conjunto por los especialistas en ortodoncia y logopedia.
En este trabajo en conjunto pueden ser sometidas personas de todas las edades, pero el tratamiento es más eficaz cuando el paciente es más joven.
Lo más adecuado es que, los ejercicios de logopedia se realicen cuando los dientes y huesos están aún en proceso de desarrollo, es decir, en la fase de la ortodoncia interceptiva.
Soluciona tu mala mordida
La mordida perfecta es indispensable y no tan solo a nivel estético, ya que está considerada como un problema de salud pública debido al alto impacto en la calidad de vida de los pacientes que lo sufren, que va desde deterioro de las piezas dentales así como la aparición de enfermedades dentales y orgánicas.
Es importante el adecuado diagnóstico de todos los factores que ocasionan la mala mordida y tratarlos a tiempo, de ahí la necesidad de su corrección durante la infancia, ya que eso nos garantizará el éxito efectivo de cualquier tratamiento que amerite el paciente.
Si tienes un problema de mala mordida o problemas asociados a esta, acude a nuestra Clínica Vinateros para realizarte un adecuado diagnóstico y aplicarte el tratamiento correctivo acorde a tu caso, con el objeto de disminuir rápidamente las consecuencias de la maloclusión y ofrecerte una mayor y mejor calidad de vida, así como una estética dental y facial perfecta.
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