Ratoncito Pérez: el origen del cuento infantil
A partir de los 5 o 6 años de edad comienza la sustitución de los dientes de leche por la dentadura definitiva. Los nuevos dientes son muchísimo más fuertes, resistentes y duros. La gran mayoría de los niños españoles viven la pérdida de sus primeros dientes provisionales con suma alegría, debido a que es muy probable que el Ratoncito Pérez pasará por sus dormitorios para dejarles un estupendo premio. Desde la Clínica Dental Vinateros te vamos a contar la historia del Ratón Pérez, para que sepas cómo mantener la ilusión en tus hijos.
Los niños interpretan el cambio de dentadura como un signo de que se están haciendo mayores. Esto es algo fascinante para los más pequeños de la casa. Con el fin de que los peques vivan la pérdida dental con ilusión y pierdan su miedo ante lo desconocido es interesante que conozcan el cuento del Ratoncito Pérez. Desde nuestra clínica dental en Madrid apostamos siempre por mejorar nuestros tratamientos dentales infantiles. Contamos con un departamento de odontopediatría, especializado en técnicas específicas para tratar a los más pequeños de la casa.
Con el objeto de que el Ratoncito Pérez no se lleve dientes picados es importante que tus hijos visiten al odontopediatra desde que son muy pequeños. Nuestro consejo es comenzar con las visitas al dentista infantil en el momento en el que comienzan a aparecer los primeros dientes de leche. Estas visitas nos ayudan a contar con una historia clínica dental de calidad y así planificar procedimientos dentales de alta calidad.
Por otra parte, cuando ya empiezan a caerse los dientes de leche y aparecen las primeras piezas dentales definitivas es el momento idóneo para llevar a cabo una consulta de ortodoncia infantil. En nuestra clínica dental planificamos la ortodoncia interceptiva a estas edades, con el propósito de guiar el crecimiento de las estructuras dentales de los peques, evitando tratamientos ortodónticos más complejos en el futuro. La Dra. Sara Gil alberga muchísima experiencia en tratamientos de ortodoncia para niños.
La historia del Ratoncito Pérez
El origen del cuento del Ratoncito Pérez es un poco difuso. Esta figura es muy popular a lo largo y ancho del planeta. En España es un ratón el que se lleva los dientes de leche como si fueran un trofeo y deja un regalito para el niño, pero en otros países está la figura del “Hada de los dientes”, que tiene una función similar.
El objeto de estos cuentos infantiles es básicamente el de eliminar el miedo de los peques ante la pérdida de dientes. De esta manera, los niños están ilusionados ante la esperada visita de un ratoncito que les dejará un regalo en sus dormitorios. Además, es importante explicar a los peques que el Ratoncito Pérez solo quiere dientes sanos. De esta forma, conseguimos que los niños aprendan a lavarse los dientes y a cuidar sus sonrisas desde bien pequeños.
En España hemos achacado la historia del ratoncito Pérez al padre Luis Coloma. La Reina María Cristina solicitó a Coloma un cuento infantil para su hijo, Alfonso XIII. El joven futuro rey había perdido uno de sus dientes de leche y se sentía bastante asustado con este hecho. Y así es como, en 1894, el padre Coloma redactó el famoso cuento del Ratón Pérez.
La historia que narró este jesuita habla de un pequeño ratoncito que cada noche visitaba a los niños para jugar con ellos. Una de las noches, el ratoncito viaja a través de tuberías y llega a la habitación del Rey Budy, que es hijo de Maricastaña. Ambos personajes son el rey Alfonso XIII y la Reina Maria Cristina.
Poco después, el rey del cuento y Pérez se hacen muy amigos y ambos viajan cada noche para visitar a otros niños. El pequeño rey averigua de este modo que no todos los niños del pueblo viven tan bien como él, con las comodidades de palacio. Debido a esto, Budy y el Ratoncito Pérez intercambian los dientes de leche que los niños dejan bajo sus almohadas por monedas.
Este es uno de los posibles orígenes del cuento del Ratoncito Pérez, aunque Benito Pérez Galdós, escribió 10 años antes La de Bringas, una novela en la que se menciona al Ratón Pérez. Por lo tanto, es posible que esta figura infantil ya fuera popular antes del cuento escrito por el padre Coloma.
En Francia, la baronesa d’Aulnoy publicó La Bonne Petite Souris (El buen ratoncito), en el siglo XIII. En esta historia habla de un hada que se convierte en ratón, con el fin de derrotar a un malvado rey. Para ello, se oculta bajo la almohada el monarca, tras lo que se le caen todos los dientes.
El Cuento del Ratoncito Pérez
Aquí puedes leer el cuento del Ratoncito Pérez, para que puedas contárselo a tus hijos. Esta historia pretende conseguir que los niños no se sientan intimidados con el dentista y aprendan a cuidar sus dientes:
“Érase una vez, un pequeño ratón de ciudad llamado Pepito Pérez, que vivía con su familia en un agujerito de la pared. Vivían junto a una panadería y, por las noches, él y su padre iban a recoger todo lo que encontraban para comer.
Un día Pepito escuchó un gran alboroto en el piso de arriba y trepó por las cañerías hasta llegar a la primera planta. Allí vio un montón de aparatos, sillones, flores, cuadros… Parecía que alguien se iba a instalar allí. Al día siguiente volvió y descubrió que era una clínica dental y eso le gustó mucho. A partir de entonces todos los días subía a mirar y aprendía. Luego practicaba lo aprendido con su familia.
Y así el Ratoncito Pérez se fue haciendo famoso. Venían ratones de todas partes para que los curara. Pero empezaron a venir ratones ancianos con un problema más grande: no tenían dientes y querían comer turrón, nueces, almendras…
Cuando el Ratoncito ya se iba a su casa sin encontrar la solución, apareció en la clínica un niño con su mamá. El niño quería que el doctor le quitara un diente de leche para que le saliera más rápido el grande y fuerte. El doctor se lo quitó y se lo dio de recuerdo.
El Ratoncito Pérez pensó que podría comprarle el diente al niño, así que espero a que todos se durmieran y entró en la habitación. El niño se había quedado dormido con el diente debajo de la almohada. Al pobre ratoncito le costó mucho encontrar el diente, pero al final lo logró, y lo cambio por un bonito regalo.
A la mañana siguiente el niño vio el regalo y se puso contentísimo, así que se lo contó a todos sus amigos del colegio. Y a partir de ese día, todos los niños dejan sus dientes debajo de la almohada para que el ratoncito se los cambie por un regalo”.
Los regalos del Ratón Pérez
La tradición en España manda que cuando se le cae un diente de leche a un niño, lo debe depositar debajo de su almohada por la noche. El Ratoncito Pérez, cuando el niño esté durmiendo, cambiará su diente por una moneda o algún otro regalo.
La carta al Ratón Pérez
Muchos niños de esta edad están aprendiendo a escribir, por lo que la carta al Ratoncito Pérez es un motivo excelente para hacerlo. Así el roedor puede saber qué le hace ilusión a niño y se la queda de recuerdo. Existen muchas plantillas en Internet para descargarse, pero un dibujo del peque suele gustar más a nuestro amigo.
La puerta del Ratoncito Pérez
Algunas casas y clínicas dentales tienen puertas de acceso a los túneles por lo que se mueve el Ratoncito Pérez. Eso ya depende de las ganas que tengas padres y madres de ayudar al ratón a llegar a su casa. También se pueden encontrar en Internet o librerías.
Si tus hijos comienzan a perder sus dientes de leche, pide cita en Vinateros para que el Ratoncito Pérez se lleve dientes sanos, libres de enfermedades y caries infantiles. Visitar al odontopediatra es esencial para mejorar la salud oral de los más pequeños de la casa. Recuerda solicitar nuestra Tarjeta Paciente, que está cargada de ventajas y promociones.