Salud dental en las diferentes etapas de la vida
¿Cuando ir al dentista?
Muchas personas solo van al dentista cuando sienten dolor. Pero ¿Cuando ir al dentista? Debemos recordar que el término “ salud dental ” no significa curar una enfermedad, sino evitar su desarrollo y por lo tanto prevención.
Aunque todos sabemos que las técnicas que se aplican hoy en las clínicas dentales son prácticamente indoloras, hay gente que todavía tiene miedo y ansiedad a la hora de ir al dentista. Por estos u otros motivos, la visita a las clínicas dentales se reducen únicamente a cuando el paciente tiene algún tipo de dolor. Existen alternativas como la sedación consciente que evitaría estos síntomas.
Algunos de los motivos por los que los pacientes suelen acudir al dentista son daños en los dientes, cambio en su color, aparición de manchas, caries, sangrado, hipersensibilidad…
Lo mejor para que estos terribles dolores de boca no aparezcan es visitar al dentista, por lo menos, dos veces al año. En cada consulta, se te informará del estado de tu salud dental y podrá recomendarte alguna pauta a seguir si fuera necesario.
Cada 8-10 meses un paciente con una boca sana debería realizarse una limpieza dental o profilaxis para tener una higiene bucal completa que elimine todos los restos de placa como prevención ante posibles enfermedades periodontales por ejemplo.
A parte de las revisiones dentales ordinarias cuando es mejor ir al dentista?
Si somos pacientes de implantología, deberemos llevas una revisión constante de los implantes o las prótesis para evitar la periimplantitis, por ejemplo.
Un paciente de ortodoncia, deberá mantener ciertas visitas al dentista para revisar la posición de sus dientes que suele verse alterada de nuevo con el paso de los años a pesar de la ortodoncia realizada, se llama recidiva y es interesante los retenedores dentales.
Los pequeños deberán visitar cuanto antes al odontopediatra, y a los 5 o 6 años, ver al ortodoncista. Ahora para los más pequeños hay tratamientos de ortodoncia invisible como Invisalign First, para denticiones mixtas. El éxito depende en mucho casos de la edad a la que se comienzan los tratamientos.
Y como en casi todos los casos, en el tema de tu salud dental es mejor prevenir que curar, ya que muchas de las personas que llegan al dentista con dolencias en estado avanzado, hacen “más caro” y “más difícil” poder solucionarlo.
En definitiva, ahora, ir al dentista no debe generar miedo, sino confianza y no podemos retrasar nuestra visita hasta sentir ese horrible dolor.
Salud dental en niños
Poder establecer cuáles serán los hábitos de higiene bucal es fundamental porque de esa forma los más pequeños van a poder cuidar sus dientes y mantenerlos en todo momento muy sanos evitando así problemas bucales.
Dentro de este cuidado dental de los niños hay algunas pautas que es bueno seguir:
- Cepillado de los primeros dientes: Cuando empiecen a salir los primeros dientes a los niños, hay que establecerles que comiencen a utilizar un cepillo infantil con el cual puedan cuidad sus piezas dentales. Generalmente esto se da desde los dos años. Elegir una pasta con fluor es ideal. Hoy en día existen pastas dentales y cepillos infantiles que hacen todo mucho más rápido y sencillo. Es bueno que en los primeros momentos el adulto esté al lado del niño, sobre todo hasta que pase determinada edad porque en un inicio no tienen la fuerza y la capacidad para cepillarse sus dientes individualmente ni lo harán a consciencia. Es durante este proceso que van a mejorar y van a poder ir aprendiendo las diferentes técnicas de cepillado.
- Momento del día para cepillarse los dientes: Dentro de este aprendizaje, uno de los más importantes es el saber que los niños deben cepillarse los dientes cada vez que termine de comer o de cenar. Una buena regla a implementar desde el inicio es que antes de irse a la cama, se tienen que cepillar los dientes, lo cual hará que poco a poco se vaya convirtiendo en una rutina eficaz. Si los niños ven que los adultos también se cepillan los dientes, enseguida querrán copiarlos, con lo cual, una buena práctica es que toda la familia se cepille los dientes al mismo tiempo para que de esa forma vean y valoren la importancia de hacerlo.
- Técnicas de cepillado: De a poco, deberás ir enseñando a los niños las distintas técnicas de cepillado que existen para que puedan aplicarlas cuando empiecen a hacerse cargo de su salud dental. El uso de hilo dental así como también de enjuague bucal es importante que lo tengan en cuenta para que sepan que de esa forma se hace una limpieza completa de las piezas dentales.
- Consultas con el odontólogo: La figura del odontólogo, debe estar presente desde el inicio en el cuidado dental de los niños. De esa forma sabrán que esa persona será la encargada de ayudarles a darles un mantenimiento adecuado a sus dientes.
Dentista en el embarazo
Si estás embarazada o lo has estado, sabrás que es muy importante la revisión del dentista en el embarazo ya que se es más factible de que haya enfermedades bucales en esos momentos. Acudir al dentista durante este período de la vida es fundamental porque nos indicará cuáles son los tipos de cuidados necesarios que debemos hacer con el fin de proteger nuestra boca de distintas enfermedades.
Una de las primeras cosas que debe ver el dentista en el embarazo es la posibilidad de que existan o no encías y cómo se encuentran las mismas en ese momento. Puede que durante el embarazo, si había algún tipo de caries, el proceso se acelere por lo que podría terminar en una patología mucho mayor. Es por eso que el tratamiento dental del dentista en el embarazo debe ser aplicado lo antes posible con el fin de evitar que haya complicaciones a futuro y que esa carie termina en una endodoncia o similar.
Cuando se va al dentista en el embarazo, es necesario advertirle al profesional sobre el estado de gestación porque en el caso de que tenga que aplicar algún tipo de anestesia debe saberlo ya que no todas son atas para el embarazo
Dentro de las enfermedades bucales más frecuentes que puedes encontrar, las que más se destacan son la gingivitis y los problemas en las encías como puede ser el propio sangrado generando así una enfermedad periodontal. En la mayoría de os casos, estas enfermedades bucales aparecen a partir de segundo mes de gestación y poco a poco van a ir avanzando con el mismo embarazo, pero una vez que se tenga el parto se superará el inconveniente e irá a mejor.
En el primer trimestre de embarazo es mejor evitar la realización de radiografías o la toma de medicamentos, mientras que en el segundo trimestre es el ideal para aplicar tratamientos. Ya en el tercer trimestre es cuando hay que tener más cuidado con la anestesia.
La higiene bucal de la mujer embarazada debe ser mucho mayor a la que tenía anteriormente para evitar que estas enfermedades avances y de esa forma cuidar todas las piezas dentales que debido a la falta de calcio y los inconvenientes hormonales podrían sufrir mucho más daño del habitual.
Mitos de la salud dental durante el embarazo
Mucho se habla sobre las enfermedades bucales que viven las mujeres durante el embarazo y todo lo que puede sucederles. La realidad es que si bien hay un alto porcentaje de mujeres que pueden sufrir de enfermedades gingivales durante esta etapa, no todas sufren de lo mismo.
Cuando una mujer está embarazada sufre de mayores cambios hormonales los cuales producen sin lugar a duda que hay aun desequilibrio. Por ejemplo, está la hormona gonadotropina coriónica la cual se libera una vez que el embrión se implanta en el útero. Esta hormona puede hacer que las encías sean mucho más susceptibles y que sufran daños por parte de la placa dental.
Pero una vez que se tiene al niño, la llamada “gingivitis del embarazo” desaparece por completo.
Aunque la gingivitis es la enfermedad bucal más común en las embarazadas no es la única. Las caries también pueden estar presentes aunque no hay un dato oficial que marque que debido al embarazo hay mayor número de caries en una mujer. Si es verdad que existe un mayor erosionamiento en lo que se refiere al esmalte dentario lo que a largo plazo podría llegar a afectar en la aparición de caries, sobre todo si se tiene unos primeros meses de embarazo complejos en donde los vómitos y las náuseas están presentes.
Entonces, hay que tener en cuenta que no todo lo que se dice sobre la salud dental en el embarazo es verdad. Por ejemplo, se dice que el bebé obtiene el calcio de parte de los dientes de la madre. Es verdad que el bebé necesita calcio, pero este calcio viene de los huesos de la madre y no de los dientes. También hay que aclarar que es falso el hecho de que durante el embarazo no se pueden realizar tratamientos dentales por la anestesia. Hay que tener mucho más cuidado y hacerlo en los meses oportunos con un especialista que tome en consideración el caso y haga uso de una anestesia apta para embarazadas.
En definitiva, no hay que olvidar que durante este período, es necesario cuidar mucho más cada pieza dental, por lo que las consultas al odontólogo deben hacerse con mayor frecuencia. El cepillado y el cuidado en el hogar debe hacerse con mucho más cuidado y poniendo hincapié en la limpieza después de cada comida sobre todo si se bebe algo azucarado para evitar que la placa dental quede en el esmalte. Consulte con su odontólogo si necesita agregar algún tipo de cuidado extra durante este período tan importante para la mujer.
La salud dental en la menopausia
El cuidado de nuestra boca debe hacerse en todo momento, pero hay etapas en la vida en las que se requiere tener mucha más atención, como por ejemplo en el embarazo o bien en la menopausia, un momento muy particular para las mujeres y aunque hay unas alteraciones generales que hacen que esto pueda llegar a afectar nuestra sonrisa.
Durante la menopausia existen unos cambios hormonales muy grandes en donde por ejemplo hay un descenso general de los estrógenos y de la progesterona lo que hace que se forme con mucha más rapidez los andrógenos. Estos cambios van a repercutir en la salud dental en la menopausia, generando distintos tipos de patologías y haciendo que sea mucho más fácil tener caries y otras enfermedades.
Una de las patologías más comunes durante esta etapa es la que se llama Síndrome de la boca ardiente que es en donde se siente una quemazón general en la zona de la lengua. También está el Síndrome de la boca seca algo muy común con el paso del tiempo y sobre todo algo que se ve presente en la propia menopausia.
Otra de las patologías más típicas en esta época es la de la periodontitis, en la cual hay inconvenientes en la zona de las encías en la mujer pudiendo llegar a aflojarse las piezas dentales.
Es por estos motivos y más que la salud dental en la menopausia debe ser mucho mayor a la que tenemos habitualmente. En esta etapa hay que acudir con más frecuencia al odontólogo y aplicar tratamientos de prevención para que de esa forma no se llegue a un punto innecesario en donde corra riesgo nuestras piezas dentales, entre otros puntos importantes.
Controlar el cepillado, hacer uso de un buen enjuague bucal, aplicar hilo dental en las zonas que debe hacerse así como acudir a nuestro odontólogo son algunas de las tantas tareas que puedes realizar para evitar que haya problemas en la salud dental en la menopausia.
Y si ya cuentas con alguna patología, entonces lo mejor será aplicar un tratamiento lo antes posible para que no siga avanzando y termine afectando otras zonas de la boca.
Si tienes sequedad o halitosis, dile a tu especialista este problema para que pueda enviarte productos específicos para la limpieza y el cuidado de tu boca.
Salud dental en la vejez
Así como cada día nos preocupamos del tema de la salud de nuestros dientes, llega un momento en la vida en donde se debe tener mucho más cuidado como es el caso de la salud dental en la vejez.
Lamentablemente con el paso del tiempo, los cambios que va sufriendo el cuerpo son muy bruscos, en particular lo que refiere a los maxilares, una parte que hace que se soporte a todos los dientes y que poco a poco se van viendo afectados ya que los tejidos se desgastan por todo el uso así como también las encías en su interior.
Frente a todo eso, hay algunas cuestiones que salen a la luz como enfermedades posibles en la salud dental en la vejez como es el caso de la resequedad en la boca, los sangrados así como también las caries o los dolores generales.
¿Cómo evitarlo? Lo mejor es mantener siempre una higiene dental adecuada, teniendo en estos casos un mayor mantenimiento del que se tiene habitualmente con el fin de que no aparezcan esos sangrados.
Cuando la higiene dental es correcta, entonces no existe el mal aliento ni ningún tipo de inconveniente en la mordida.
Cada vez que existe un cambio concreto en las encías, lo ideal es poder consultar con un especialista médico con el fin de que pueda ayudar y determinar cuál es la mejor solución para cada caso. Cuando las encías empiezan a sangrar es un signo muy claro de que hay algo que no está bien y que necesita de un cuidado especial.
En muchos casos, la salud dental en la vejez tiene que tener en cuenta el uso de las prótesis dentales. Las prótesis se deben cambiar cada siete años, debido a que las encías generales de la boca se reducen por lo que existe un maltrato general de los maxilares que hace que se afloje al máximo. Hay que destacar aquí también que la prótesis tiene que estar en un estado excelente para que los gérmenes no pasen de un lugar a otro y así evitar la formación de placa bacterial o de hongos.
La elección del cepillo dental es otra de las cuestiones a tener en cuenta, ya que es con el paso del tiempo el tipo de cepillo a usar así como la pasta dental puede que sea diferente y se necesite cambiar.
En Clínica Dental Vinateros disponemos de un equipo altamente cualificado que te ayudará a conseguir un optima salud dental para evitar problemas mayores. Es importante que si llevas tiempo sin venir a vernos pidas cita con nosotros ¡Haremos la puesta a punto de tu boca!
